Con este año que empieza quiero dar la bienvenida a un proyecto personal que llevo tiempo preparando, Matrona a un Clic. Por fin esta aquí, por fin empiezo a ver la forma de esta idea fugaz que paso por mi cabeza al inicio del confinamiento y que poco a poco ha ido cogiendo forma.
Mi trabajo como matrona me encanta, y nunca he sido capaz de elegir entre el trabajo en el hospital o el trabajo en consulta. Cada parte del embarazo y la crianza es muy especial, y nunca me ha gustado renunciar a poder acompañar en todas ellas. Por lo tanto, desde el inicio de mi camino como matrona, he ido compaginando el hospital y la consulta de una manera u otra, haciendo un poquito de malabares… pero compensa cuando te encanta lo que haces. Y hasta aquí, todo muy bien, pero en marzo del 2020 surgió el gran reto.
Todo el mundo confinado en su casa y todo lo no imprescindible cerrado llevo a cerrar mi consulta presencial y la preparación al parto, pero ¿de verdad la preparación al parto no es esencial? ¿Tiene menos derecho una mujer embarazada este año a los beneficios de esta? ¿Es justo volcarnos tanto en que se pueda dar a luz con la máxima normalidad posible y nos olvidemos del apoyo en el embarazo y el postparto? Pues lógicamente, no. Así que me puse manos a la obra y en abril ya estaba pasando consulta por teléfono y dando las clases online entre guardia y guardia y de una manera muy casera, pero buscando que “mis mamis” pudieran seguir teniendo una atención completa de la mejor manera posible.
¡Y aquí llegó mi sorpresa!
Me encontré con muchas familias que, en condiciones normales, no hubieran venido a la preparación al parto y que, en cambio, ahora sí que querían. Ahora podían hacerlo desde casa con su hijo mayor por ahí, podían ver la clase a la hora que no le interfiriera con el trabajo, no tenían que coger el coche media hora para llegar a la ciudad… por estas y por otras muchas razones. Así que decidí que no quería que esto fuera algo pasajero, decidí que quería seguir ofreciendo la máxima flexibilidad posible a todas las mamás que lo necesitarán incluso aunque no hubiera confinamiento,
Y bueno… aquí estamos. Con muchísima ilusión puesta aquí, con unas ganas infinitas de poder acompañar a mamis de toda España y, sobre todo, con esos nervios característicos que acompañan a un proyecto nuevo, pero todo el esfuerzo merecerá la pena si puedo seguir poniendo mi granito de arena para que sea un poquito más fácil enfrentarse al embarazo, al parto y a la maternidad.